La Torcida es una viejita rectoría que hemos alquilado cerca de Vic, es una casa de dos plantas y un altillo amplio. Está situada sobre una pequeña montaña, tiene unas vistas maravillosas y mucha paz.

Decidimos que La Torcida era un nombre que nos definía muy bien, la casa, en algún momento de hace muchos años, sufrió algún tipo de fractura, de movimiento sísmico y tiene como cicatriz una grieta que la recorre de arriba a abajo. Nosotras también tenemos nuestras cicatrices y nos sentimos bastante torcidas muchas veces, en muchos momentos.

Llevamos ya un año arreglándola y queremos convertirla en un lugar donde poder realizar talleres, crear un espacio de encuentros y también de residencias y retiros artísticos.

Un lugar para el arte y la vida, que desde la libertad y el amor permita otros relatos del mundo.

La Perversa y La Torcida, lo urbano y lo rural, espacios disidentes e intercomunicados, para pasarlo bien, compartir conocimiento y vivencias, aprender fotografía y lo que haga falta.